Cinco reglas de oro para hacer networking efectivo en esta «nueva normalidad»
Tras tres años de vivir en un “mundo virtual”, ahora las personas privilegiamos más la calidad sobre la cantidad. Hemos entendido lo poco que valen las relaciones superficiales y lo vital que resultan las conexiones genuinas, basadas en valores y en un interés genuino por el éxito del otro. Por eso ya no se realizan tantos eventos presenciales de networking, en los que participan cientos o miles de personas, sino experiencias híbridas con grupos más pequeños y segmentados.
Para tener resultados, hacer networking necesita un enfoque más estratégico y deliberado a través de la aplicación de estas cinco reglas de oro. Veamos cuáles son.
1.- Tu identidad digital es tu principal tarjeta de presentación.
¿Qué es lo primero que hacíamos en evento de networking cuando nos hablaban de un cliente o proveedor potencial? Antes solíamos pedir referencias entre nuestros conocidos o solicitar un curriculum o carpeta de presentación. Ahora, simplemente buscamos información por Internet. ¡Y eso es exactamente lo que harán tus nuevos contactos!
Por eso es tan importante tener una identidad digital no solo inmaculada, sino poderosa. Eso significa tener una presencia activa en redes sociales profesionales, como LinkedIn, pero también en aquellas en las que puedas compartir novedades y experiencias del día a día de tu empresa (como Instagram o Twitter).
Asegúrate de no mezclar tus publicaciones personales con las del negocio (es mejor manejar perfiles separados), sobre todo si te gusta compartir opiniones políticas o imágenes de tus momentos en familia o con amigos. Cuida las interacciones con tus seguidores mediante respuestas rápidas y amables a preguntas, pedidos de información y quejas.
2.- La confianza es la base de toda relación de negocios.
Como ya mencionamos tantas veces en este blog, para hacer networking efectivo no podemos concentrarnos en vender de entrada, sino en construir relaciones fuertes y duraderas de a poco. La razón principal está en la confianza, misma que solo podemos ganar con el tiempo y con demostraciones genuinas de honestidad, autenticidad e interés por el beneficio mutuo.
En la nueva normalidad, esa confianza puede fortalecerse a través de las recomendaciones de nuestros clientes en la página web de la empresa o en LinkedIn, con los comentarios de los consumidores en la tienda en línea, en un marketplace o en los comentarios compartidos de Google.
3.- Los encuentros en persona ya no son imprescindibles.
Si algo han tenido de bueno los periodos obligatorios de aislamiento social, es que dejaron en claro que la mayoría de las reuniones presenciales pueden realizarse a través de una llamada telefónica o una plataforma de videoconferencias. Por eso es tan importante que hoy las empresas cuenten con las herramientas necesarias para comunicarse de manera profesional; por ejemplo, con una cuenta paga de Zoom que permita tener sesiones prolongadas con muchos participantes y poder grabarlas.
También es clave que en las sesiones virtuales se apliquen las mismas reglas de cortesía y respeto del mundo físico. En este caso nos referimos a la puntualidad, al cuidado en los gestos y comentarios, a la escucha atenta cuando hablan otras personas, al registro de lo acordado a través de una minuta y el seguimiento de las tareas pendientes para la realización de un proyecto.
4.- Las oportunidades de networking digital son tan valiosas como las presenciales.
Aun cuando las empresas han retomado casi por completo su actividad prepandemia, las puertas para fortalecer tu red de contactos de manera digital ha quedado abierta. Por ejemplo, un blog o redes como LinkedIn se han posicionado definitivamente como una herramienta idónea para compartir contenidos útiles, llamar la atención sobre una marca o para generar nuevos prospectos.
Lo mismo sucede con la participación en eventos virtuales, como ferias o presentaciones de productos, o la realización de eventos de capacitación gratuitos donde puedes compartir conocimientos y destacar las virtudes de productos y servicios como los que ofrece tu empresa.
5.- Hay que nutrir las redes con tiempo y atención.
Por último, debes de considerar que la virtualidad puede dispersar la atención y el interés de tus contactos, ya que es mucha la información que hoy tenemos al alcance de un clic. Por lo tanto, es importante que no permitas que esas relaciones se enfríen: aliméntalas a través de mensajes periódicos y relevantes. ¿Qué herramientas resultan útiles hoy? Por ejemplo, las listas de difusión de WhatsApp, los newsletters, y los grupos de Facebook.
Pero no te olvides del contacto humano y personalizado, infalible para generar cercanía y confianza. Envía tarjetas y notas de agradecimiento por correo o mensajería, a veces acompañadas por un pequeño regalo. Toma el teléfono y haz una llamada espontánea cada cierto tiempo.
Anímate a agendar una comida o un encuentro rápido en una cafetería. Al final, nada puede reemplazar la experiencia de mirarse a los ojos mientras se comparten alegrías y frustraciones, información útil y el entusiasmo ante los proyectos futuros.