5 consejos efectivos para crear el análisis de tu competencia
Se suelen aplicar los análisis FODA al iniciar un negocio o emprendimiento (o al lanzar un producto nuevo), pero después de eso te adaptas a la inercia de la operación de la empresa, y dejas de observar cuál es tu competencia directa o quiénes son tus competidores indirectos. Pero analizar a la competencia debe ser una estrategia constante para que detectes tus puntos fuertes. Para algunas empresas, un análisis competitivo requiere observar a diario los perfiles de su competencia en las redes sociales.
Muchos profesionales del marketing no aprovechan al máximo las auditorías de la competencia por falta de tiempo o información. Sin embargo, saber la historia de su marca y qué hacen otras empresas para posicionar sus productos es crucial para atraer a tu consumidor ideal. Por lo tanto, el análisis de tu competencia debería ser parte esencial de cualquier estrategia de marketing.
Tipos de competencia
La competencia de una empresa depende del segmento de mercado en el que se mueve, el tipo de operación, el modelo de negocios, entre otros factores, así que cada producto tendrá sus propios competidores directos o indirectos. De ahí la importancia del análisis de competencia o instrumentos como el método FODA.
No es lo mismo una empresa cuyo modelo de negocio apuesta por un mercado general o masivo a una compañía que está enfocada en un nicho de mercado. Sin embargo, es una realidad que todos tendrán competidores; quizá por un breve lapso un modelo de negocio o un producto disruptivo no tendrá competidores directos, pero no tardarán en surgir otras compañías con una oferta o un esquema de operación similar.
¿Cómo identificar a tu competencia? Según la teoría de las Fuerzas de Porter, hay 5 aspectos que convertirán a una empresa o persona en tu competidor:
- Rivalidad por tener un modelo de negocio similar.
- La negociación con clientes.
- Cuando se comparten proveedores.
- Surgimiento de nuevas empresas.
- La presencia de productos o servicios sustitutos.
Esto quiere decir que cualquier «ente» que se mueva en tu mismo sector propiciará una tensión competitiva, ya sea por obtener los mismos clientes, satisfacer las mismas necesidades, tratar con los mismos proveedores, etc.
¿Por qué hacer un análisis de competidores?
Como ya lo mencionamos, hacer un análisis de la competencia te permite comprender sus fortalezas y debilidades en comparación con las de tu empresa y así encontrar una brecha en el mercado. Otras razones para hacerlo son:
- Ayuda a reconocer cómo mejorar tu estrategia empresarial.
- Muestra cómo superar a tus competidores en áreas de atención al cliente.
- Determina quiénes son tus competidores más directos y si comparten el mismo público objetivo.
- Detecta el nivel de interacción y compromiso que tienen con los clientes.
Ahora que conoces su importancia, te mostramos cómo realizar un análisis de la competencia eficaz:
1. Identifica a tus competidores principales.
Antes de comenzar el análisis, tu prioridad es saber cuáles son las marcas que trabajan para el mismo sector del mercado hacia el que te diriges. Algo común es que ofrecen tu mismo servicio o producto.
Debido a que el mercado es tan grande quizá no sea posible que identifiques a todas las marcas o productos que están en competencia. Pero sí puedes realizar una lista de los competidores principales. Utiliza ciertos criterios como los canales de interacción y distribución, la zona geográfica en la que están activos, las coincidencias entre las imágenes empresariales (como logotipos, colores o conceptos) y los valores que representa cada marca, entre otros aspectos.
Si no sabes cómo identificar a las empresas que son tu competencia más directa, puedes usar un motor de búsqueda, como Google, y ver cuáles empresas aparecen cuando utilizas ciertas palabras clave que identifican a tu negocio, servicio o producto (así como al buscar los valores, o el objetivo o misión empresarial de tu compañía).
2. Compara el contenido de tu competencia.
Una vez que tengas una lista de las empresas que parecen ser tu competencia principal o competencia directa, te conviene analizar su contenido para verificar que, en efecto, son las marcas o empresas más parecidas a la tuya. Haz una lista de unas 15 o 20 compañías, que serán suficientes para que delimites cuáles son las más relevantes.
Gracias al análisis de contenido podrás darte cuenta de qué tanto estas empresas están dirigidas al mismo tipo de clientes que tu compañía y qué tan similares son respecto a otros elementos (como la visión o valores que los impulsan). Si tu lista no se reduce significativamente, puedes descartar aquellas empresas que tengan más diferencias contigo, aunque sigan siendo parte del mismo mercado de tu negocio.
Te recomendamos que no te deshagas de los nombres de las empresas que descartaste. En un futuro pueden ser referentes para una renovación de tu negocio o convertirse en tu nueva competencia. Además, estas empresas pueden formar parte de tu competencia indirecta y seguramente en algún momento te será útil considerarlas para generar estrategias.
3. Analiza los datos con herramientas especializadas para auditar la competitividad.
Una vez que hayas realizado una primera evaluación del contenido, puedes hacer una segunda ronda con una herramienta específica, como un software o una plataforma en línea. Ello te ayudará a identificar elementos más específicos y técnicos, como el alcance que tienen actualmente con sus contenidos, la interacción con sus lectores (en el caso de blogs) o espectadores, su reputación en redes sociales, el número de seguidores, la periodicidad de sus publicaciones y otros elementos que te ayudarán a calcular su éxito y penetración en el mercado.
Algunas de las herramientas para realizar estos análisis especializados son Ahrefs, Quick Sprout, Moz Link Explorer, Alexa y Buzzsumo. Es conveniente que consideres utilizar varias herramientas. Aunque algunas como Quick Sprout ofrecen un análisis general, muchas se especializan en analizar elementos detallados, como el alcance de páginas o artículos en redes sociales (Buzzsumo), la autoridad de un sitio web (Moz Link Explorer) o las ubicaciones en que el alcance de tu competencia es mayor (Alexa).
Una vez que hayas realizado los análisis de tus competidores con estas herramientas, resalta las interacciones más destacadas (positivas y negativas). Identificarlas te ayudará a comprender mejor las cualidades de tu competencia y sus áreas de oportunidad. Eso te dará claridad para saber desde dónde puedes tomar ventaja.
4. Estudia su estrategia SEO.
Aunque esto podría formar parte del elemento anterior, lo consideramos como un componente separado por su relevancia. La estrategia SEO que tenga tu competencia puede ser determinante para evaluar y comparar los lugares que ocupa dentro de una clasificación en motores de búsqueda. Esto, sin duda alguna, también es importante al momento de definir el número de clientes que cada empresa atrae y retiene.
Identificar las palabras clave será de suma importancia. Si observas que hay un grupo de palabras clave en las que destacan tus competidores y consideras que estos temas no son la especialidad de tu empresa, siempre puedes crear contenidos para el mismo segmento de mercado, pero que versen sobre otros temas. Usar las palabras clave adecuadas mejorará la visibilidad de tu sitio.
5. Compara tus ventajas competitivas y genera una estrategia.
Por último, te recomendamos hacer una comparación global de todos los datos que recolectaste de las empresas que son tu competencia, e identificar en cuáles aspectos tu negocio o marca los rebasa. Este paso definirá el tipo de estrategia que utilizarás para mejorar el rendimiento y reforzar los elementos distintivos de tu marca o negocio, ya sea porque cuentas con una mejor calidad en un área o porque sabes que reúnes los elementos necesarios para destacar.